Como ya sabrás, el agua y la suciedad son dos de los mayores enemigos del parquet natural, pudiendo llegar a sufrir daños irreversibles si no le proporcionamos los cuidados necesarios. Pero puede que no sepas que el sol también es otro de los agentes que más efectos negativos puede tener sobre él. Por eso, es importante evitar que los rayos del sol incidan directamente sobre nuestro parquet, de modo que no se descolore con el tiempo y que siga luciendo como el primer día.

Cómo afecta la radiación solar al parquet

Como ya hemos dicho, la luz del sol es uno de los principales factores de desgaste de la madera. Esta contiene dos tipos de rayos, los infrarrojos y los ultravioletas, y los daños que ocasionan a la madera unos y otros son distintos.

Los rayos ultravioletas afectan directamente a la celulosa de la madera, provocando que pierda su color original, siendo la decoloración mayor o menor en función del grado de exposición. Los rayos van resecando el material, alterando su color y deteriorando el acabado. La madera incluso puede volverse opaca, de aspecto viejo y presentar manchas de quemado.

Por su parte, los rayos infrarrojos hacen que la madera se reseque y que se produzcan grietas. Por ejemplo, cuando hay grandes ventanales en el salón corremos el riesgo de que se produzca el llamado efecto lupa, que hace que los parquets naturales sufran fisuras, especialmente si se trata de maderas tropicales. Eso sí, en ningún caso se compromete su integridad estructural.

Además, hay que tener muy en cuenta las temperaturas y las humedades del ambiente. La temperatura  máxima de la vivienda tiene que ser de 25^oC y la humedad de oscilar entre el 35% y el 65% para que nuestra tarima no se vea afectada.

Tratamiento para revivir el color del parquet

Por lo general, las maderas de tonalidades más oscuras sufren más que las claras. No obstante, con una buena labor de mantenimiento  y limpieza, podemos revivir los colores originales de la madera, mejorando su aspecto en general.

• El primer paso es limpiar la madera en profundidad y dejar que toda la superficie se seque por completo. Para ello, suele usarse una máquina limpiadora de cepillos giratorios junto con un producto específico para parquet.

 

• El segundo paso es aplicar un aceite fabricado especialmente para parquet. Este tipo de aceites contienen aditivos que ayudan a reducir los efectos de la radiación ultravioleta sobre la madera. Después hay que eliminar el aceite sobrante con un trapo de algodón y una pulidora. Habrá que esperar unas 24 horas para poder pisarlos.

 

Lo ideal es hacer este tratamiento dos veces al año, a ser posible en primavera y otoño, de manera que el parquet esté preparado para soportar los rayos del sol, las bajas temperaturas y la humedad del invierno. De esta forma, evitaremos que se decolore y que aparezcan grietas, luciendo como su fuera nuevo.

Consejos para proteger el parquet de la luz del sol

Además de realizar este tipo de tratamientos, es importante prevenir que el parquet se vaya decolorando. En este sentido, si quieres seguir manteniendo la calidad y el color del mismo, sólo tienes que seguir los consejos que te damos a continuación.

Evita la luz natural

El sol proporciona la luz y la calidez que a todos nos encanta para nuestro hogar, pero también puede afectar al color del suelo de parquet. Los rayos ultravioletas del sol pueden terminar por decolorarlo. Para protegerlo, es recomendable cerrar las cortinas y las persianas de las estancias cuando no estés en ellas. No obstante, si quieres seguir disfrutando de la iluminación natural, otra opción es teñir las ventanas con un protector de rayos UV.

Decora tus ventanas con plantas

Si no te gustan las cortinas y no quieres teñir las ventanas, otra solución es acudir a un vivero y comprar las plantas que más te gusten. A las plantas les encanta el sol y siempre están buscando más luz. Puedes colocar plantas frente a tus ventanas o arbustos justo fuera de la ventana para que absorban la luz, lo que te ayudará a mantener el sol alejado de tu parquet.

Mover los muebles

Intenta no mantener los muebles en el mismo sitio durante varios años, especialmente si tienes parquet en casa. Lo ideal es que al menos muevas los muebles un par de veces al año, de modo que se use por completo y pueda limpiarse periódicamente, manteniendo el color general y la durabilidad.