¿Estás pensando en cambiar tu viejo suelo por uno más moderno y que se adapte mejor a las necesidades de tu vida diaria? El suelo es uno de los elementos más importantes de una vivienda, ya que es uno de los que más personalidad dan al conjunto. Por eso, cambiarlo supone una gran oportunidad para crear un espacio único.

Hoy, en concreto, queremos hablarte sobre las ventajas del suelo laminado, que además de aportar elegancia y mejorar de forma inmediata el atractivo a cualquier estancia, es económico y resulta fácil de instalar. Pudiendo ser colocado tanto en el salón como en el baño y en la cocina.

Es una opción duradera

Los suelos laminados destacan por su gran durabilidad. De hecho, no es extraño que haya fabricantes que ofrecen varias décadas de garantía. Gracias a ello, pueden soportar mejor los arañazos, el paso de las personas, el movimiento de los muebles y los zapatos de tacón de aguja.

Entre los factores que hay que valorar en este sentido se encuentran la calidad del tablero con el que se fabrica cada lama y la capa protectora exterior, que mide la resistencia a la abrasión. Por ejemplo, un valor de AC3 quiere decir que es apto para uso doméstico, un AC6 para uso comercial y un AC6 para usos muy intensivos.

Gran confort en la pisada y sensación de calidez

Aunque los suelos laminados no pueden llegar a lograr la misma calidez que proporciona la madera, sí que es verdad que consiguen imitar esa sensación, sobre todo cuando se instalan sobre suelo radiante. Además, si ponemos por debajo una buena capa aislante, conseguiremos una mayor absorción del sonido de la pisada y un magnífico aislamiento acústico, que se traduce en una sensación muy cómoda a la hora de caminar descalzos sobre la superficie.

Elegancia y velocidad

El suelo laminado es moderno, fácil de limpiar y muy elegante. Por eso, si decides instalarlo en tu vivienda, les estarás dando un gran cambio a todo el conjunto. Además, no olvides que puede colocarse en muy poco tiempo y sin muchas complicaciones. De hecho, en una casa de menos de 100 metros cuadrados no se suele tardar más de dos o tres días. Incluso si eres manita y se te dan bien las tareas de bricolaje, puedes hacerlo tú mismo. No obstante, siempre es mejor dejarlo en manos de profesionales, ya que pueden surgir complicaciones.

Puede instalarse sobre muchos tipos de subsuelos

No hace falta contar con un suelo específico para poder llevar a cabo una instalación de suelo laminado. Con Que esté seco y nivelado es suficiente. Puede instalarse sobre granito, cemento, madera o vinilo, por ejemplo. Y sui algún día queremos volver a cambiarlo, podemos incluso volver al subsuelo original, ya que al tratarse de unan instalación flotante que no se encuentra fijada al suelo puede hacerse incluso de inmediato.

Encaja con cualquier estilo decorativo

Otra de las principales ventajas del suelo laminado es su gran versatilidad, encajando perfectamente con cualquier estilo decorativo de nuestro hogar. Desde los estilos más minimalistas a los más coloridos. Además, hay que destacar que el suelo ayuda a exaltar cada uno de los matices del mobiliario y los textiles gracias a la belleza y calidez que proporcionan, dejando que los colores destaquen sin perder su belleza natural.

Una gran variedad de tonalidades

Hoy en día, es posible encontrar una gran variedad de suelos laminados para elegir. Desde tonos claros como la madera de arce a otros más oscuros como la madera de roble. Es muy importante que antes de decidirte por una o por otra, lo valores muy bien, ya que cada uno de ellos dará una imagen diferente a la casa.

Por ejemplo, si la vivienda es pequeña y no tiene mucha luz, es mejor optar por suelos claros, que aportan luz y dan mayor sensación de amplitud. En cambio, los suelos oscuros son ideales para hogares con niños o mascotas, ya que disimulan mejor la suciedad. Además, confieren más elegancia y personalidad. Pero también existe la opción de combinar varios tonos en un mismo suelo.

Aporta calidez a la vivienda

Una de las cualidades más destacadas de los suelos laminados de madera es la gran calidez que aporta a cualquier hogar, sin importar el tono que hayamos escogido, el lugar donde lo coloquemos o cómo lo instalemos. Por este motivo, si decides instalar un suelo laminado en tu vivienda, la verás mucho más bonita y acogedora.

Garantías

Las garantías ofrecidas por los fabricantes son bastante amplias. Y siempre y cuando la instalación se haya realizado correctamente, se cumple de forma rigurosa. Por ejemplo, un caso en el que la garantía no daría cobertura sería el deterioro de un suelo laminado que se viera afectado por la humedad de un baño cuando no ha sido diseñado para estar en zonas húmedas. Y tampoco se cubriría una instalación si no se han respetado las juntas de dilatación, un problema bastante habitual entre los instaladores no profesionales.